jueves, 31 de julio de 2008

La condensación por agua versus la condensación por aire

La eficiencia energética de la condensación por agua es algo que ya industria y muchos organismos oficiales reconocen ya. Pero, para profundizar en esta idea, nada mejor en un ejemplo: la hipotética sustitución de la condensación por agua por la condensación por aire supone incrementar el gasto energético del 20 al 80 por ciento o más para producir el mismo frío; puesto que la temperatura de condensación aumenta en un intervalo que oscila entre 6 y 18 K.

El hecho de que una instalación frigorífica condense a una temperatura más alta implica:

- Presiones de condensación más elevadas, lo cual acarrea un mayor riesgo de fugas del refrigerante de la instalación y el consiguiente impacto ambiental, o efecto invernadero directo.

- Incremento del coste de producción en la industria, con la consiguiente disminución de la competitividad de las empresas frente a otros proveedores sujetos a legislaciones menos restrictivas.

Al aumentar la temperatura de condensación, disminuye la producción frigorífica de una instalación. Esto quiere decir que, para producir el mismo efecto frigorífico, se necesita:

o un compresor mayor, más caro
o un motor eléctrico de accionamiento mayor, más caro
o un condensador mayor, más caro
o un condensador con más ventiladores, más ruido, más coste de insonorización
o mayor consumo de agua en origen: para producir 1 kWh se consume
como media 100 l. de agua
o mayor consumo energético
o mayor impacto ambiental por necesitarse más instalaciones generadoras de electricidad, las cuales emiten más CO2 a la atmósfera. Mayores costes por emisiones de CO2
o mayores pérdidas de energía en transportar esa mayor energía eléctrica demandada desde la central generadora hasta el punto donde se encuentra el equipo receptor
o mayor valor absoluto de las puntas de demanda de energía eléctrica, lo que supone nuevas inversiones en centrales generadoras (2.839 MW<>3 nucleares/7 de ciclo combinado) y en líneas de distribución.

Según esto, cabe decir que sustituir las torres y condensadores evaporativos de las instalaciones de refrigeración y aire acondicionado existentes en España por aerorefrigeradores y condensadores enfriados por aire supondría incrementar la potencia eléctrica generada necesaria en aproximadamente 2.839 MW, lo cual equivale a construir, para asumir tal incremento, 3 centrales nucleares de tipo medio o 7 centrales térmicas de ciclo combinado.

lunes, 21 de julio de 2008

El Ministerio de Industria, Turismo y Comercio apoya económicamente la instalación de condensadores y torres de enfriamiento evaporativo

El Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDAE), ha desarrollado 28 medidas de ahorro eficiencia energética con las que garantizar unas actuaciones mínimas en todos los sectores de actividad. Cinco de ellas están dirigidas a la edificación con el objetivo de promover la normativa vigente en materia de eficiencia energética para edificios nuevos, rehabilitaciones y sus instalaciones. Para ello, ha desarrollado unas líneas de apoyo económico dirigidas a la rehabilitación energética y a la promoción de nuevos edificios de alta calificación energética, en la que prima aquellos servicios que, como la calefacción, la climatización o la producción de agua caliente sanitaria, demandan mayor consumo de energía.
Dos de estas medidas establecen líneas de apoyo económico a la utilización de equipos para la producción de calor y frío que favorecen la eficiencia energética, entre los que se incluyen los condensadores y torres de enfriamiento evaporativo. Éste es el caso de las actuaciones destinadas a la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones térmicas existentes; entre las que que pueden recibir apoyo económico se encuentra el empleo de sistemas que combinen equipos convencionales con técnicas evaporativas que reduzcan el consumo de energía de la instalación: enfriamiento evaporativo, condensación evaporativa y preenfriamiento evaporativo de aire acondicionado directo e indirecto previo a la recuperación de calor del aire de extracción. Las ayudas económicas cubren hasta el 22% del coste de la reforma. También las actuaciones dirigidas a la construcción de nuevos edificios con alta calificación energética contemplan como costes subvencionables el establecimiento de instalaciones de climatización y la producción de agua caliente sanitaria.
El apoyo económico brindado a estos sistemas responde a que las torres de refrigeración de agua y condensadores evaporativos ofrecen una relación óptima entre inversión y rendimiento frente a soluciones similares, en la medida que proporcionan un ahorro tanto económico como energético al sistema de productivo español de hasta 25.000 euros anuales por instalación. Ésta es la conclusión a la que ha llegado ANEFRYC (Asociación Nacional de Empresas de Frío y Climatización) tras comparar estos equipos con otros alternativos. En Europa más de 500.000 instalaciones industriales utilizan equipos de enfriamiento evaporativo, una de las alternativas más eficaces en el campo de la refrigeración industrial. La eficiencia energética de estos equipos en relación a los que realizan la condensación por aire se deriva del menor consumo de energía eléctrica y la reducida utilización de agua, que es recirculada y devuelta al ambiente en forma de vapor.

jueves, 17 de julio de 2008

Otra vez una incorrecta asociación entre torres y legionella

A pesar de las escasas posibilidades de que una torre de evaporación por agua sea la causante de un brote de Legionella y que, precisamente, en los últimos brotes detectados la procedencia probable del mismo residía en el agua de red sin concurrencia alguna de las torres, la alarma social en torno a este problema sigue siendo grande.
El pasado lunes 14 de junio, el periódico Siglo XXI, se hacía eco de unas declaraciones de Felipe Rivera, presidente de la Asociación Nacional de Empresas de Control de Plagas (ANECPLA), en las que señalaba a las torres de refrigeración como las instalaciones más peligrosas para el desarrollo de la bactería y recomendaba aplicar las medidas de mantenimiento que indica la legislación.
Desde ANEFRYC si bien pensamos que siempre es conveniente recordar la importancia de vigiliar el estado y mantenimiento de las instalaciones, también subrayamos que no es necesario generar alarma social en torno a la utilización de estos equipos ya que "la limpieza y desinfección de las instalaciones y la dosificación de productos desinfectantes" a las que se refiere el mencionado artículo son prácticas habituales en las instalaciones y todos los fabricantes ofrecen los tratamientos y consejos de mantenimiento pertinentes.
Es más, para que se produzca un brote de legionellosis asociada a una torre de enfriamiento o condensador evaporativo debe producirse una cadena de circunstancias altamente improbable y todas ellas han de estar relacionadas y sucederse: una colonia virulenta de Legionella Pneumophila entra en la instalación; unas condiciones incontroladas que favorecen la multiplicación de la bacteria, circunstancia improbable en un equipo cuyo mantenimiento se atenga a la normativa vigente; descarga de una corriente de aire con un porcentaje elevado de gotas en suspensión y con niveles de concentración de la bacteria infecciosa contaminado al ambiente; e inhalación por parte del ser humano susceptible de padecer la enfermedad (inmunodeprimidos) del número suficiente de gotas constitutivas de los aerosoles como para producirla.
Teniendo en cuenta estas circunstancias, la asociación de los brotes de Legionella a la utilización de torres y condensadores de enfriamiento evaporativo resulta del todo injustificada y no hace más que generar una alarma social innecesaria que, más de una vez, ha repercutido negativamente en la imagen que de estos equipos tienen los ciudadanos y actuado en decremento de su implantación.
Recordemos que, recientemente, esta Asociación ha recibido el apoyo de la Dirección General de Industria perteneciente al Ministerio de Industria y del ICAEN, Instituto Catalán de Energía, que reconocen el papel fundamental de los equipos de refrigeración evaporativa en la eficiencia energética de nuestra industria.
En este sentido, el secretario general de ANEFRYC, Manuel Lamúa, se ha puesto en contacto con el presidente de ANECPLA puesto que una mayor comunicación entre asociaciones siempre derivará en una mejor y más pertinente información hacia los ciudadanos.

miércoles, 9 de julio de 2008

El ICAEN subvencionará la instalación de condensadores y torres de enfriamiento evaporativo

Carlos Barnils, vicepresidente de ANEFRYC (Asociación Nacional de Empresas de Frío y Climatización), junto con otros representantes del Grupo de Torres de Refrigeración de la Asociación, se ha reunido con Francisco Torres, jefe del Área de Ahorro, y con Lluis Morer i Forns, Técnico de Industria, del Instituto Catalán de Energía (ICAEN) con objeto de revisar el estado actual que atraviesa el mercado de los condensadores y torres de enfriamiento evaporativo, analizar la contribución de estos equipos al ahorro de energía y adoptar nuevas medidas que contribuyan a la eficiencia energética.

El ICAEN se ha comprometido a lanzar un programa de apoyo económico, con una duración de un año, dirigido a fomentar el uso de equipos y sistemas destinados a la producción de calor y frío que favorecen la eficiencia energética e incluir entre ellos los condensadores y las torres de enfriamiento evaporativo.

En la reunión, ANEFRYC insistió en la negativa influencia que sobre estos equipos han tenido a lo largo de los últimos años diferentes iniciativas dirigidas a restringir su utilización en algunas Comunidades Autónomas, así como la alarma social generada en torno a los mismos, acusados injustificadamente de ser los causantes de brotes de legionella. ANEFRYC señaló la necesidad de contrarrestar esta falsa pero extendida imagen de peligrosidad, una necesidad con la que también está de acuerdo el Instituto Catalán de Energía y que se traduce en esta nueva línea de subvenciones, así como en otras ayudas de tipo económico dirigidas a los usuarios de torres y condensadores evaporativos.

jueves, 3 de julio de 2008

Las torres de refrigeración y el efecto invernadero

Los equipos de refrigeración evaporativa contribuyen activamente a la reducción de emisiones de efecto invernadero.

Esto es así porque con esta tecnología la condensación de las instalaciones frigoríficas y de las de aire acondicionado se realiza a una temperatura adecuada para que la presión en el sector de alta del circuito frigorífico sea muy inferior y, por consiguiente, disminuye el riesgo de fugas de refrigerante y el impacto potencial directo. Por otra parte, al disminuir la temperatura de condensación, el consumo de la energía eléctrica necesaria para hacer funcionar una máquina frigorífica, con idénticas prestaciones que la condensada por aire, puede reducirse del 20 al 80 por ciento, e incluso más.

Además, como se necesita aproximadamente una cuarta parte de aire, en comparación con un equipo de enfriamiento por aire, el consumo de energía de motores de ventiladores es muy inferior.

Resulta evidente que al producirse un menor consumo de energía también es menor el efecto invernadero indirecto producido por la central térmica encargada de generar dicha energía. En consecuencia, con estos equipos se consigue un coste menor por derechos de emisión de CO2. Téngase en cuenta que 1 kWh de energía eléctrica consumida procedente de centrales térmicas puede suponer, si se utiliza carbón, cerca de 1Kg de CO2 emitido a la atmósfera; En el caso de una central de ciclo combinado producir 1 kWh serían 0,4 Kg de CO2 emitidos a la atmósfera.

Por último, se producen menos pérdidas energéticas en el transporte de esa menor energía necesaria desde la central generadora hasta el punto de consumo.